En el año 2400, el humano desarrolló la súper tecnología, donde la espiritualidad casi no se veía
En la ciudad Madrid, vivía una madre con su hijo de 9 años; los recuerdos del padre para el niño eran varios
Un buen esposo que falleció en el combate estelar, donde los oscuros extraterrestres no pudieron la tierra dominar
El planeta fue ayudado por los pleyarianos, extraterrestres avanzados y buenos hermanos.
Pero luego los hermanos mayores viajaron a su planeta, dejando que evolucione el humano y llegue a su meta
Lucia la madre del niño llamado Felipe; lo amaba con mesura, le enseñaba el amor de la celestial hermosura
Eran almas gemelas unidas de corazón, iban más allá de la ciencia y la primaria razón
Le enseñaba los valores de luz y esperanza, a Dios siempre brindaban alabanza.
En medio de tanta tecnología y materialismo, ellos mantenían el mágico optimismo
Un día del cielo unas naves bajaron, Seres en forma de lagartos a la tierra atemorizaron
Eran mucho más desarrollados en combate y máquinas destructoras potentes; donde los hombres fueron dominados y dejaron de ser valientes
Lucia y Felipe, se ocultaron en el sótano muy blindado debajo de su casa; pero los lagartos por los humanos iban de caza.
Los tomaban como experimentos, también de esclavos y mascotas; en la tierra iban muy mal las cosas
Lucia le dio a su hijo un cuarzo verde como pacto de amor, le dijo, se valiente amado Ser de honor
Los oscuros con un radar encontraron el escondite, la madre por un túnel muy pequeño lanzó a su hijo para que su rapto evite
Ambos lloraron, pero sus almas nunca se separaron.
Felipe, cayó en un pequeño riachuelo, él estaba triste y sin consuelo
Colocaba en su corazón el cuarzo y pensaba en su madre, también recordaba a su padre
La madre fue esclavizada, ella solo pensaba en su hijo, además se sentía triste y desolada
El pequeño fue rescatado por un grupo de personas en resistencia; ellos luchaban para darle a la tierra independencia.
Pero los oscuros eran superiores, donde no había piedad en sus corazones
Los terrícolas no tenían ninguna forma de comunicarse con los pleyarianos, para que nuevamente vieran a auxiliarlos
El niño tenía un don muy especial, se desdoblaba fácilmente de manera astral
En las noches iba a visitar en espíritu a Lucia; ella encadenada y con lágrimas permanecía.
Al mirar la esencia de su hijo, ella lo besaba y abrazaba; él dulcemente la miraba
Felipe le decía, mamita te sacaré de este lugar, eres mi único amar
Resiste por favor, recuerda que yo soy tu amor
Ella le dice, si hijo mío, pero usa tu don estelar, comunícate con los pleyarianos para que nos vengan ayudar.
Él se despidió tristemente, pero le prometió a su madre que iba hacer como su padre valiente
Lucia, quería soltarse de las cadenas en forma de rayos láser; pero lamentablemente nada podía hacer
Su hijo viajó en esencia al planeta pleyariano; un Ser le dijo, que haces aquí hermano
Él dijo, ¡por favor!, ¡por Favor!... les pido que salven a la tierra, hombres de honor.
Felipe suplicaba, mientras su madre, desde la tierra oraba
Un Ser luminoso le dijo, la tierra ha olvidado el amar, ¿por qué la quieres salvar?
Felipe dijo, porque aún hay seres de buen corazón, con un despertar de conciencia en expansión
Y están enviando luz, como Jesucristo que por amor murió en la cruz.
Por favor tengan piedad, no olviden la humanidad
Ellos dijeron, no nos gusta intervenir, pero lo vamos hacer porque amamos a todos los seres del universal vivir
Eres muy valiente, hombrecito sabio e inteligente
El niño agradeció con ternura, su espíritu volvió a su cuerpo de hermosura.
Los pleyarianos se teletransportaron y a la tierra bajaron
Una gran batalla iniciaron, se miraban rayos tenebrosos y estruendo como truenos; pero los seres de luz a la oscuridad vencieron
Hubo una apacible calma, Felipe al mirar a su madre corrió y la abrazó con toda su alma
La alegría los invadía, fue inolvidable ese día.
Los humanos aprendieron a vibrar en alta frecuencia, y la gran mayoría despertaron su conciencia
Felipe y Lucia viven en feliz unidad, también fueron homenajeados, por salvar a todos sus amados
Los pleyarianos nuevamente partieron, y alegres a los humanos vieron
Gracias Dios por esta futurista historia, que los hombres de este planeta miren tu gloria.
Bendiciones,
Yider Elder Araque Cerón
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